1.3.3 Escenario natural de la sustentabilidad
NO ES POSIBLE COMPRENDER el proceso histórico de un pueblo si se le aísla del ámbito geográfico en el cual se ha desarrollado a lo largo de los siglos. Cualquier asentamiento humano ha sido influido por las características físicas que lo rodean, de la misma manera que las acciones de los grupos sociales han incidido en el sistema ecológico del lugar habitado.
México es un país de fuertes contrastes culturales, sociales y económicos, en parte producidos por sus grandes diferencias geográficas que existen dentro de su extenso territorio. De ahí que actualmente cobren especial importancia las historias regionales y locales, ya que nos permiten comprender mejor los diversos escenarios, la variedad de ritmos y las condiciones propias con que se desenvolvieron, primero los pueblos mesoamericanos, después las sociedades novohispanas, y por último los estados confederados del México independiente.
En el altiplano central de México se encuentra el territorio de lo que hoy es el estado de Tlaxcala. Atravesado por el eje neovolcánico, posee una superficie muy accidentada, con alturas mínimas de 2 100 metros sobre el nivel del mar, y cuyas partes montañosas cubren el 60% de su extensión total. De las tres cadenas orográficas que la cruzan, una se extiende del norte hacia el oriente, en sus límites con el estado de Puebla; es la sierra Tlaxco-La Caldera-Huamantla, que con cimas de más de 3 000 metros forma una muralla natural que obstaculiza el paso de los vientos húmedos procedentes del golfo de México, modificando el clima de las planicies que se extienden en la parte oriental del estado. Un segundo conjunto montañoso se inicia en el espolón de la sierra Nevada, en el poniente de la entidad, continúa hacia el sur por el llamado Bloque de Tlaxcala y termina, tras una cierta interrupción, en el volcán de la Malinche, cuya cumbre se alza hasta los 4 461 metros. Finalmente, una cadena de cerros de menor altura, intercalada con algunas barrancas y pequeñas planicies, corre con dirección suroeste-noroeste, uniendo los dos sistemas montañosos anteriores.